Cada época ha tenido su estilo de abanico. Hubo uno barroco en el siglo XVIII como también palmitos neoclásicos y románticos en el siglo XIX, en los cuales encontramos sobre todo composiciones de escenas galantes, campestres, historicistas, florales, mitológicas o de temática regional. Son los más abundantes en las colecciones existentes en Europa.
Pero también laten en el aire palmitos vanguardistas del Modernismo y el Art déco e incluso abanicos asiáticos que muestran paisajes exóticos del lejano oriente, estilos todos ellos que no son tan conocidos por la ciudadanía. Con el fin de dar a conocer estas joyas, el Museo del Palmito de Aldaia (MUPA) acoge dos exposiciones temporales simultáneas con abanicos de la colección permanente del museo. Se trata de “El arte del Modernismo en nuestros palmitos” y “Vestigios de palmitos asiáticos a casa nuestra”. Palmitos incógnitos e inexplorados, rincones artísticos que merece la pena descubrir y disfrutar.

El palmito de la transgresión femenina
“El arte del Modernismo en los nuestros palmitos” muestra 50 abanicos singulares del Modernismo y el Art déco de la colección permanente del MUPA, cedidos o dados por Abanicos Blay Villa, Juan Manuel Cobo y Penélope Garrido. La exposición, abierta desde el pasado 22 de marzo, estará abierta hasta el 22 de junio de 2024. Estos dos estilos favorecieron una renovación estética del palmito, entre los años 1890 y 1930. El palmito abandona las formas tradicionales y se convierte en un objeto funcional y decorativo que acentúa de una manera especial la feminidad seductora, dando una nota de color y exuberancia.
El Modernismo (1890-1920) crea un palmito joven y libre en el cual la mujer adquiere una dimensión moderna y emancipada, hecho que refuerza el Art déco entre 1920 y 1930. La imagen de la mujer liberada del periodo de entreguerras es ataviada con trajes cómodos, ligeros y elegantes, estándar de moda femenina que tanto popularizó la diseñadora Coco Chanel. Una mujer con el peinado recortado al estilo garçon que practica actividades y ocios hasta aquel momento restringidos a los hombres, como fumar, hacer deportes o conducir coches.
Hubo uno renovación estética en el palmito. El país y el varillaje de los palmitos adquieren nuevas formas. Empiezan a elaborarse grandes palmitos con plumas de ave los cuales transmiten una elegancia y sensualidad que más que airear, acarician. Se introdujeron escenas oníricas y temas florales geometrizados como las llamadas rosas Mackintosh, elementos futuristas y motivos egipcios surgidos a partir del impacto del descubrimiento de la tumba de Tutankamon el 1922, así como temas de gustos específicos como perros, gatos, caballos, aves, escenas de hípica y damas con indumentaria típica de los felices años veinte costalero grandes sombreros de moda o practicando alguna actividad de ocio. También aparecen países revivals de escenas tradicionales y mitológicas, pero realizados ahora con más originalidad y elegancia. Igualmente hubo un desarrollo creciente del palmito publicitario, que adopta los cánones estéticos modernistas y deco tanto en el abanicos plegables como en los pai-pai de cartón. Aquí se supera el semicírculo de 180 grados típico del palmito plegable europeo y aparecen nuevos modelos con menos grados de apertura, como el popular abanico estilo ballon. Además, se introducen nuevos materiales como el plástico y la galalita que, junto a la madera y los materiales tradicionales, hacen composiciones de varillas que rompen la línea recta y adquieren formas ondulantes como olas del mar o geometrías irregulares.
En definitiva, palmitos graciosos, amables y coloristas los cuales sugieren espacios de evasión, lugares pintorescos, fantasías nocturnas o bien elementos representativos de la vida moderna de los años veinte que exaltan la alegría de vivir.

Vestigios de palmitos asiáticos
El MUPA conserva también una rica muestra de palmitos asiáticos de los finales del XIX y principios del XX, procedentes principalmente de China y Japón, los cuales han sido cedidos por Abanicos Blay Villa de Aldaia, Matilde Asensio Salvador (hija de la compositora Matilde Salvador), Mireia Fernández, Penélope Garrido y Montserrat Rojo. Estos palmitos se muestran en la exposición “Vestigios de palmitos asiáticos en casa nuestra”, abierta desde el 22 de marzo hasta el 31 de noviembre de 2024 situado en la primera planta del museo.
Se trata de una muestra de gran calidad artística que exhibe la minuciosidad artesana, la pasión creativa y la cuidadosa policromía pictórica de las culturas de la Asia oriental. Palmitos que reproducen exuberantes escenas palaciegas de la antigua monarquía china, paisajes japoneses fabulosos o coloridos y placientes motivos vegetales campestres orientales. Hechos de materiales singulares y varios como por ejemplo el bronce y la plata, la madera de frutero, caña de bambú, seda blanca, papel de arroz, marfil asiático, carey o espina de pescado.